domingo, 9 de mayo de 2010

Violetas en el cuello





Música clásica muy alta.

Él: Hola.
Ella: Hola.
Silencio.
Ella: ¿Te molesta la música?
Él: Sí.
Él : No, no. De hecho me encanta. Me vuelve loco.
Silencio.
Ella: ¿Perdón?
Él: (tímido) Sí, loco. Porque me entran una ganas locas de venir aquí corriendo, romper la puerta de una patada, ir a tu lado, y abrazarte fuerte, y bailar, y hacer el amor, bailando… para siempre.
Ella: ¿Perdón? Un momento.
Va a parar la música.
Se para la música.Ella: Perdona, ¿qué decías?
Él: Pero luego, nada. Las palabras no me salen.
Silencio.
Portazo.
Vuelve a sonar la música.

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